Soy enfermera, en el hospital donde trabajo siempre había escuchado sobre historias paranormales, nunca me había pasado nada a mi, ni siquiera en el turno nocturno que es cuando mayor actividad nos hemos dado cuenta que se presenta.
Hasta que un día administrando medicamento a una de mis pacientes (la cual estaba muy delicada) me dice: “Enfermera podrá decirle a la niña que está atrás de usted que se vaya con sus papás porque no me da dejado dormir”, se me erizo la piel, porque atrás de mi no había nadie y no era área pediátrica, es decir, no había niños cerca. Es lo único raro que me ha pasado
Segundo relatos de enfermeras en el hospital
Yo trabajaba en un hospital en Ciudad Satélite, las chicas del conmutador siempre decían que las tocaban y escuchaban voces, cuando no había nadie alrededor.
En el tercer piso por la noche cerraba con seguro las habitaciones desocupadas y un día cerré una, camine a la siguiente y la puerta de la primera se abrió, regrese y revise la habitación a ver si había alguien y nada, volví a cerrar, revise que cerrará bien camine unos pasos y se volvió a abrir, obvio salí corriendo.
En una de esas habitaciones dejó de existir la hermana del primer dueño del hospital y se cerró, se usaba de bodega, cuando mi jefe compró el hospital abrió esa habitación y siempre estaba fría aún con calefacción y todos los pacientes que la ocupaban terminaban con complicaciones, por eso se decidió no usarla más con los pacientes.
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