Esta es la historia de mi bisabuelo. Mi mamá me cuenta que mi bisabuelo materno era muy mujeriego, cosa que hacía sufrir mucho a mi abuela, también le gustaba andar en las cantinas y que al regresarse en las madrugada cruzaba las huertas y en todas las huertas siempre hay zanjas donde pasa el agua, varias veces se cayó y mi abuela tenía que ir a buscarlo, algunas veces los lugareños le avisaban y ella iba por é, en fin, aún con todas esas cosas no dejaba las parrandas.
En una de esas ocasiones al ir muy borracho, se encontró a su paso a un animal muy grande que no lo dejaba pasar, decía que parecía un perro pero más grande y con los ojos muy rojos, al verlo así que cruzo corriendo y sin voltear hacia atrás, corrió dice que un buen tramo que hasta lo borracho se le quitó y se refugio en un tejaban deshabitado y en ruinas, ahí le ganó el sueño y se quedo dormido sobre un montón de piedras.
Cuando despierta en la mañana se da cuenta que donde estaban las piedras, había dos ollas que las tapaban unas piedras grandes, las quito y ahí encontró Centenarios, de ahí hizo su fortuna, dice mi madre que él era muy sencillo y humilde que a esa gente sin avaricia y sin buscar es a la que se le revela el dinero, porque quien va con la intención y avaricia , se les convierte en carbón.
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